¿Verdad? Si yo sabía que no eras tan tonto..
Los mensajes que le mando ya no son ni por aire, ni por tierra, ni por mar. Que las lámparas de luz acaban quemando las palabras que tanto me costó encontrar. Que los carteros no me caen muy allá y me roban los secretos que le escribo. Y sobre las botellas de vino mejor no hablar..
la última que abrí no fue muy amable conmigo..