domingo, 6 de mayo de 2012

Anoche la luna iluminaba más de la cuenta..


Quise decirle muchas cosas a la ladrona de libros, sobre la belleza y la crueldad, pero ¿qué podía contarle sobre todo eso que ella no supiera? Quise explicarle que no dejo de sobreestimar e infravalorar a las personas, que pocas veces me limito únicamente a valorarlas. Quise preguntarle cómo un mismo hecho puede ser espléndido y terrible a la vez, y una misma palabra dura y sublime. Sin embargo, no abrí la boca. Solo conseguí hablar para confiarle la única verdad que hago mía. Se lo dije a la ladrona de libros, yo misma ¿qué pensabas?

Y ahora te lo digo a ti..