lunes, 22 de noviembre de 2010

Peor que el olvido..

Fue frenar las ganas de verle otra vez. Lejos. Aislada. Sin el suave aroma de su perfume. Sacando lo mejor de mi, y lo peor de su recuerdo. Dando bandazos. De un lado a otro, sin encontrar un camino fácil de seguir. Haciendo largas paradas nocturnas. Despertando de horribles pesadillas. Peores de día, sin duda. Sin saber qué hacer, hacia dónde huir. La dependencia es tan buena y tan mala a la vez. No preciso viajar lejos para hallar lo que deseo. Quizá, peor que el olvido.. 

.. sea volverle a ver